
Método D’Hondt; un mecanismo que vulnera los principios de igualdad electoral
El método D’Hondt para muchos es culpable de sorpresas electorales, para otros, representa la garantía del sistema. Este sistema matemático, que lleva el nombre del jurista y matemático belga Víctor D’Hondt, está establecido en la normativa de muchos países, incluyendo República Dominicana.
En el país no es nuevo, se remonta a la post-dictadura de Rafael Leónidas Trujillo en el año 1962
Tras las elecciones del pasado mes de mayo, un promedio de 55 candidatos a nivel nacional alcanzó votos suficientes para lograr una curul, pero el Método D’Hondt los excluyó del Congreso Nacional en el escrutinio, por la denominada representación de los partidos.
Este mecanismo de elección fue desarrollado a finales del siglo XIX y se ha consolidado en algunos sistemas electorales del mundo. Su principal objetivo es convertir los votos en escaños de manera proporcional, minimizando la desproporcionalidad y asegurando que las minorías partidarias tengan representación.
Conforme al libro “Metodología para el análisis de estadísticas electorales”, el sistema D’Hondt utiliza una fórmula matemática para asignar escaños. Cada partido recibe una cantidad de votos que se divide por 1, 2, 3, y así sucesivamente hasta que se han asignado todos los escaños disponibles. Los números resultantes se ordenan de mayor a menor, y los escaños se asignan en función de estos valores, interpretado desde el simulador Icon.cat.
Precisamente, ahí surge el debate: ¿Es justo y equitativo que quienes ganen más votos queden fuera al tener que dividir los votos entre las organizaciones participantes? Experiencias recientes también establecen que el Método no garantiza del todo la participación de los partidos, pues aquellos que no acumulan suficientes votos podrían tener un candidato con los votos para ganar y, aun así, no resultar electos.

Funcionamiento paso a paso:
En unas elecciones parlamentarias, el paso para la selección de los candidatosse resume en tres etapas:
1. El recuento de votos, busca conocer la cantidad de votos emitidos por una zona, en el caso de la República Dominicana, por una circunscripción electoral.
2. Cada total de votos de los partidos se divide por una serie de números enteros: 1, 2, 3, 4, etc.
3. Los resultados de estas divisiones se ordenan de mayor a menor, y los escaños se asignan en orden de estos resultados hasta que todos los escaños estén repartidos. Estos escaños se asignarían a los partidos con los cocientes más altos, resultando en una representación proporcional.
Dentro de los atributos del método, se le describe como el mecanismo de elección de candidaturas plurinominales (diputados, regidores y vocales), donde se alcanza una representación más equitativa de los partidos en comparación con otros sistemas de mayoría simple (que ganan según la cantidad de votos por mayoría), facilita la formación de coaliciones y gobiernos estables, y asegura la participación de las minorías políticas y partidos pequeños.
En el país, el sistema de partidos es amplio, actualmente cuenta con unas 31 organizaciones políticas, solo dos de ellas, el Partido Revolucionario Moderno (PRM) y la Fuerza del Pueblo (FP), reúnen la mayoría de los votos, representando un promedio del 70%. En un mecanismo de elección por mayoría simple, los partidos pequeños no tendrían representación, pues los recursos y la estructura de estas maquinarias lograrían prácticamente la totalidad, teniendo solo representación aquellos partidos aliados a estos por endoso electoral, es decir, apoyo por la fuerza con la que pactan.
D’Hondt, bajo la premisa planteada, permite que los partidos minoritarios puedan alcanzar escaños en el universo de votantes, pero ciertamente, plantea el gran dilema: ¿representa la intención de la mayoría? Y es que partidos con un pequeño porcentaje de votos pueden obtener un número desproporcionado de escaños, lo que pondría en duda el llamado “voto popular”.
Expertos señalan que las fragmentaciones de fuerzas en algunos casos no permiten mayorías claras. La mayor dificultad que ve la clase política en D’Hondt, es la manera en la que distribuye los escaños por el llamado voto preferencial.
La Ley 157-13, que establece el voto preferencial, determinó que D’Hondt sería el procedimiento a implementar para la elección de los candidatos plurinominales.
¿Qué es el voto preferencial?
Según lo establece la Ley 157-13 de la República Dominicana, se entiende por voto preferencial aquel que se realiza por medio de listas cerradas y desbloqueadas, en donde el elector puede escoger al candidato de su preferencia sin importar la posición que tenga en la lista propuesta por el partido político.
De fondo, D’Hondt beneficia a los partidos mayoritarios pues les asigna un mayor número de escaños. Por ejemplo, si los escaños son solo cinco, el candidato que queda en el número seis se puede quedar fuera de la boleta a pesar de que el candidato X de otro partido tenga menos votos.
Posturas en contra
Félix Bautista: el senador por San Juan expresa que el método D’Hondt para la distribución de escaños en el Congreso es «inconstitucional». Argumenta que la Constitución dominicana exige que la elección de legisladores sea por voto “universal y directo”. Mientras cuestiona la pertinencia de modificar este método y en la nueva gestión senatorial que inicia este próximo mes de agosto, someterá la modificación de los artículos que lo establecen.
Según Bautista, el método D’Hondt contradice este principio, ya que distribuye los escaños sumando los votos obtenidos por los partidos y no de manera directa. Señala que esto asigna escaños a candidatos que no recibieron directamente esos votos, considerándolo injusto y antidemocrático, y en consecuencia en contra de la voluntad de la gente.
El senador propondrá eliminar este método en la Ley de Régimen Electoral 20-23, abogando por una elección de diputados por mayoría de votos simples.
“El método asigna votos de forma indirecta a personas que no lo obtuvieron”, manifestó Bautista a Panorama.
Ricardo de los Santos: el presidente del Senado indicó a Panorama que brindará su apoyo como legislador a la propuesta del senador Félix Bautista.
“No es posible que si alguien sacó más votos no pueda salir electo por el Método”, enfatizó.
Indicó que aún el senador Bautista no ha presentado el anteproyecto, pero se mostró a favor de la postura de Bautista, indicando que esta afecta la democracia, en virtud de que los elegidos no siempre cuentan con la mayoría.
Dagoberto Rodríguez Adames: con el objetivo de conocer la posición de los senadores que trabajarán en la propuesta de Bautista en la nueva gestión senatorial, consultamos al senador electo de la provincia Independencia.
Rodríguez Adames se muestra optimista ante la nueva legislatura: «Yo aprobaré la propuesta si Félix la somete, es una injusticia que personas que obtuvieron más votos queden fuera debido a un método que no está adaptado a este sistema». Además, indicó que este método está afectando perfiles prometedores y queridos por la comunidad.
Algunas a favor
Orlando Jorge Villegas: la opinión del actual legislador tiene una visión de futuro. Villegas indica que el método D’Hondt se basa en la convicción de que dicho método favorece a la democracia, al permitir que partidos con menos oportunidades logren escaños en la Cámara de Diputados.
Argumenta que el método no debe analizarse coyunturalmente por elección, destacando que «no se puede ver el método D’Hondt coyunturalmente por elección».
Haciendo énfasis en que ha visto opiniones de gente que, cuando el método les favorecía, hablaban a su favor, pero cuando no, cambiaban su postura, Orlando resalta que, en las elecciones de 2020, muchos partidos no mayoritarios lograron escaños gracias a D’Hondt, mencionando que «muchos partidos que no eran partidos mayoritarios, sin embargo, tenían buenos candidatos, lograron un escaño».
Aclara, además, que en las elecciones recientes el Método fue cuestionado debido a una ola favorable al Partido Revolucionario Moderno, algo que también ocurrió anteriormente con el Partido de la Liberación Dominicana.
Finalmente, defiende que el Método debe ser visto en el conjunto de los procesos electorales del país, argumentando que «desde su implementación ha permitido que la oposición tenga participación en el Congreso» y que debería permanecer para garantizar espacios a partidos minoritarios, evitando que el Congreso se vuelva favorable únicamente para un solo partido político. Concluye afirmando que apoya la legislación actual porque «favorece principalmente a los partidos de oposición, a los partidos minoritarios».
Ángel Acosta: el exdiputado Ángel Acosta reveló que planteará en una comisión de estudio de la ley electoral una nueva propuesta que aborde la problemática desde otra perspectiva.
Para él, D’Hondt no representa un obstáculo para la democracia, aclarando que todo tipo de candidatura plurinominal está llamada a tener sistemas de escaños que garanticen la participación de todos los partidos.
Indica que la deficiencia radica en la modalidad de “voto preferencial”, puntualizando que la legislación electoral dominicana valida el método actual de elección desde el año 1962. Al incluirse el voto preferencial en el año 2002 es cuando este genera pérdida de escaños por representación partidaria.
Precisa que, para reformar el método, habría que modificar la Constitución, no la normativa electoral, y se propone presentar una propuesta ante la Comisión de Estudio de Reforma de la Ley Electoral, que reveló creará el presidente Luis Abinader Corona, donde abordará la necesidad de reclasificar el territorio en departamentos electorales, como se establece en Perú.
Eddy Montás
A pesar de haber sido afectado en la distribución de escaños en la provincia de San Cristóbal, no logrando concretar su interés de continuar en la Cámara de Diputados, el actual legislador indicó a Panorama: «Mi impresión es pensando en términos políticos, no como candidato. Honestamente, el método garantiza que las minorías en muchos casos puedan entrar. ¿Por qué no debe ser directo? Atenta contra las candidaturas. En una amalgama amplia de partidos, el voto directo dispersa las candidaturas y eleva el clientelismo».
Jorge Alid Arriaza
El catedrático, consultor internacional y experto en Ciencias Políticas indicó que, en su experiencia en Latinoamérica, siempre pasa lo mismo: los partidos mayoritarios legislan a favor del método D’Hondt para lograr más escaños, pero una vez en la oposición, entienden que no les favorece.
Explica que el problema no es el método sino la manera como los partidos articulan sus fuerzas y lo resume como «partidos débiles, candidatos afectados». Indica que es responsabilidad de los países legislar para que todas las ideologías tengan espacios en sus cámaras representativas. Afirma que el Método garantiza la pluralidad y la democracia.
Le consultamos sobre la denominada fragmentación de fuerzas, descrita como una de las desventajas pues no presenta las mayorías como tal, y nos indicó que esta afirmación es una manipulación, pues siempre en el método tendrán más escaños los partidos minoritarios. Además, indica que ser así va en beneficio de la sociedad para no permitir que un solo partido tenga el control de todos los poderes, citando el caso de la República Dominicana, donde este fenómeno se ha repetido en más de tres ocasiones.
Dentro de los afectados por el mecanismo de elección se encuentran:
– José Horacio Rodríguez, candidato de Opción Democrática por el Distrito Nacional
– Pedro Jiménez, excandidato a diputado de la Fuerza del Pueblo por el Distrito Nacional
– Priscila de Oleo del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), por la provincia María Trinidad Sánchez
– Jonathan Liriano por el Partido Frente Amplio